Baladas y Reflexiones
Juan el Bautista...
Hola… El día 24 de junio celebramos el nacimiento de Juan Bautista. Su historia es muy particular y desde una experiencia cristiana sería bueno tenerla en cuenta. Comienza en un pueblito cercano a Jerusalén, instalado en un valle verde y con unos paisajes de “fotografía”. En este pueblito vivían Zacarías e Isabel y según el relato bíblico, era una pareja de ancianos muy cercanos a Dios que nunca había tenido hijos, pero que siempre tuvieron la esperanza de que por su cercanía con Dios les sucedieran cosas de las cuales se sentirían dichosos.
Un día, Zacarías estaba en el templo de Jerusalén y recibió un mensaje del Señor avisándole que su esposa Isabel estaba embarazada, que a pesar de su edad y de ser una mujer estéril, el Señor había pensado en ellos. De Isabel nació Juan a quien nosotros conocemos como Juan Bautista o Juan el Precursor. A esta altura de la historia, me detengo un momento para pensar en voz alta y acercarme a cada uno de ustedes esperando que tomen conciencia de que cada ser humano que nace en esta tierra es una esperanza que Dios le da a la humanidad para que mejore.
Cuando uno confía en Dios, está seguro de que su destino no puede ser jamás un destino de fracaso y menos de desesperanza. Tantas son las voces que escuchamos a lo largo de nuestras vidas diciéndonos: que todo está mal, que somos una falla, que tu hermano es mejor que tú, que no sé para qué naciste…
Desde nuestros hogares, desde nuestros ambientes, y desde nuestros entornos no cabe la menor duda de que el negativismo hace que muchos de nosotros perdamos nuestra auténtica identidad, que no es otra que aquella de ser la imagen y la semejanza de Dios. Eso es lo auténtico y lo que tenemos que descubrir a lo largo de nuestras vidas. Valorar el día que nacimos y a la vez valorar el día que descubrimos para qué nacimos. No siempre las circunstancias o la lógica humana nos predice nuestro futuro, lo realmente importante es descubrir más allá de las circunstancias cuál es nuestra esencia y en ella cuál es nuestro destino.
Juan nació de una pareja de ancianos, quienes nunca pudieron tener hijos por ser Isabel una mujer estéril.
De Juan dijo Jesús (Mateo 11,11): “Yo os digo que no ha nacido de mujer, hombre más grande que Juan Bautista”
Gracias por llegar hasta aquí. Hasta la próxima semana. ¡Que Dios nos bendiga!
Escucha Baladas y Reflexiones con el Padre Pablo
Todos los domingos de 9 p.m. a 1 a.m.